Bienvenidos al Consultorio Médico Pediátrico
Somos un grupo de médicos pediatras y especialistas, que estamos a disposición de Uds. para el cuidado de la salud de su niño, dando una atención de primera, con calidez y mucho profesionalismo.
Es bastante frecuente que los padres acudan a la consulta pediátrica refiriendo que sus hijos presentan rechinamiento de dientes y más aún asocian esta situación con la presencia de parásitos intestinales.
En esta pequeña revisión intentaremos aclarar un poco más el panorama de esta situación muy frecuente en pediatría.
BRUXISMO
Es el término médico como se conoce al clásico rechinamiento de dientes, básicamente consiste en el movimiento muscular mandibular voluntario o involuntario no funcionales, en el que intervienen los dientes, ya sea apretándolos entre sí o desplazándose sobre sus superficies lo que origina el clásico sonido del rechinar de los dientes.
Esta situación se produce de día o de noche (bruxismo del sueño) y este último el que genera más preocupación en los padres.
También es importante mencionar que el bruxismo es más frecuente mientras más pequeño es el paciente y su incidencia va disminuyendo conforme el niño va creciendo, afecta por igual a varones y mujeres.
En algunos casos puede generar problemas como dolores mandibulares, dolor para masticar o sensación de no poder abrir la boca adecuadamente, puede también generar abrasiones o desgastes de los dientes.
CAUSAS
La causa del bruxismo se considera multifactorial, es decir está rodeada de diversos factores que lo desencadenan, así tenemos:
1. Factores anatómicos: cuando existen anomalías óseas, articulares o mala oclusión dentaria, etc.
2. Factores psicológicos: generalmente asociados en pediatría a la ansiedad, déficit de atención e hiperactividad, estrés. Inclusive existen estudios que han demostrado el aumento de catecolaminas (sustancias que el cuerpo produce en estados de ansiedad) en orina en niños con bruxismo.
3. Alteraciones del sueño: muchas literaturas asocian al bruxismo con alteraciones del sueño y han visto que se encuentra asociado a micro despertares nocturnos, sonambulismo, terrores nocturnos, pesadillas, aunque es importante mencionar que estas alteraciones del sueño en pediatría representan un proceso normal de maduración del sistema nervioso central. Existen también estudios que demuestran que aquellos niños que duermen menos de 8 horas diarias están predispuestos a presentar bruxismo.
4. También es posible que se presente con más frecuencia en pacientes que tienen parálisis cerebral o Síndrome de Down
5. En otras ocasiones también lo relacionan a la presencia de parasitosis intestinal y más directamente relacionado con el enterobius vermicularis; sin embargo actualmente se viene demostrando con diversos estudios que no existe una correlación entre bruxismo y parasitosis intestinal.
TRATAMIENTO
Como se había mencionado anteriormente existen múltiples factores que pueden generar el bruxismo por tal razón el tratamiento está orientado a tratar de identificar la causa, aunque esta tarea es muchas veces difícil.
Como primer punto es importante que los padres sepan que esta situación se auto limita la mayoría de las veces y que disminuye conforme los niños van creciendo, razón por la cual es importante que mantengan la calma y la serenidad y de esta forma se adopta una conducta expectante, solo se observa al niño, si se identifica algún problema psicológico es importante empezar a tratarlo, para de esa manera disminuir la ansiedad, estrés, hiperactividad etc.
La mayoría de veces solo con mejorar dichos estados se logra disminuir la frecuencia del bruxismo.
En casos en los que el bruxismo si genera alteraciones dentarias o problemas como dolores mandibulares, dolor al masticar; entonces si será importante consultar con el odontopediatra para que realice una intervención con algún tipo de férulas para evitar que las lesiones se incrementen.
En conclusión debemos recordar que el bruxismo es multifactorial, que actualmente ya no se ve una asociación entre bruxismo y parasitosis intestinal. La mayoría de veces se auto limita y disminuye conforme los niños crecen.
Si se identifica algún factor desencadenante es importante empezar a tratarlo. La mayoría de veces solo se debe optar por una conducta expectante y en algunos casos es importante referir al odontopediatra para tratamiento.
Artículo de la Dra. Melissa Herrera Castro
Pediatra en Consultorio Médico Pediátrico
Referencias bibliográficas:
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3. Odontólogo Pediatra (Madrid) Vol. 25, N.º 3, pp. 209-216, 2017
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5. De Oliveira MT, Bittencourt ST, Marcon K, Destro S, Pereira JR. Sleep bruxism and anxiety level in children. Braz Oral Res. 2015; 29: 1-5.